Tips para pintar paredes
Te contamos de algunos consejos útiles y fáciles, para que puedas aplicarlos si estás con ideas de renovar la pintura de tus espacios.
1. Elegir una buena pintura y pinceles o rodillos de calidad
Elegir los elementos adecuados es esencial, ya que de esto depende en gran medida el resultado. Sabemos que mientras la pintura sea de mayor calidad, el precio ascenderá un poco; no obstante, invertir algo más en ella nos garantiza menor tiempo de aplicación y menor cantidad, ya que tienen mayor poder cubritivo y durabilidad.
2. Cubrir el piso para evitar manchas
Colocar papel diario, alguna sábana vieja o carpa, para que el goteo de la pintura no manche el piso. También se pueden utilizar cintas para cubrir los bordes de las ventanas y puertas.
3. Técnicas básicas
Es importante mezclar y revolver bien el contenido de la lata de pintura, para lograr un color uniforme. Cuando pintamos con pincel o rodillo hay que seguir 3 pasos: aplicamos la pintura, la distribuimos uniformemente y, con cuidado, la alisamos para obtener un resultado parejo.
4. Cómo utilizar los pinceles
Introducir el pincel hasta un tercio de las cerdas dentro del balde o la bandeja. Para delinear un borde, utilizar el lado estrecho del pincel. Es importante realizar trazos largos y lentos. Pintar desde el área seca hacia la pintura fresca, para evitar que la pintura quede marcada.
5. Cómo utilizar el rodillo
Antes de comenzar a pintar, humedecerlo ligeramente con agua para eliminar posibles hilos sueltos. Con el rodillo cargado de pintura, utilizar la técnica de aplicación denominada “Z” o “N”, por el dibujo que se realiza con el rodillo sobre la superficie a pintar. De esta manera se va aportando la pintura para luego desplazarla al resto de la pared, así se conseguirá mayor poder cubritivo y mejor nivelación, con un mínimo salpicado.
6. Limpieza y guardado de los utensilios
Se deben limpiar los pinceles y rodillos con el diluyente que se haya utilizado, y luego enjuagar repetidas veces junto a jabón blanco neutro. Al finalizar, envolver cada una de las herramientas utilizadas en papel de diario, para quitar la humedad restante. Una vez secas, guardarlas envueltas en hojas de papel de diario.
